Historias de gente puzzlera

Anécdotas de gente puzzlera sucedidas en Puzzlemanía

Cada día entran muchísimas personas buscando puzzles en nuestra tienda en Barcelona, y por supuesto, con 21 años de antigüedad han ocurrido un montón de anécdotas dignas de ser contadas.

Eso es precisamente lo que os vamos a contar hoy, anécdotas que han ocurrido en Puzzlemanía, enternecedoras, divertidas e interesantes vivencias y comentarios que han pasado por nuestros ojos y oídos. Aunque también os contaremos historias tristes, sorprendentes e incluso exasperantes.

Durante estos 21 años que la puerta de Puzzlemanía permanece abierta hemos tenido tiempo para ver, oir y representar millones de situaciones. Estas son unas cuantas experiencias vividas en nuestra tienda contadas por Caroline.

Un chico vino a la tienda para hacer un puzzle personalizado de amor de 280 piezas, la profesión de su pareja es cartera. Una vez realizado el puzzle, envió varias piezas a familiares y amigos suyo de España y fuera de España para que estas personas enviasen las piezas a la chica y así poco a poco, conforme ella fuera recibiendo el puzzle pudiera ir montándolo. Una original y romántica demostración de amor ¿No crees?.

Una vez, hace muchísimos años, ocurrió algo muy extraño. Desapareció una pieza de un rompecabezas de un cliente que vino con él para enmarcarlo sin encolar en la tienda, nos volvimos locas buscando la pieza que se perdió en la tienda por alguna razón que desconocemos. Esta situación es inusual pero, no necesariamente extraña. Lo paranormal llegó cuando, después de buscarla incansablemente en la tienda y llegar a casa, apareció allí, ¡En mi casa!. ¡Algo más allá de lo extraño!. Por suerte tuvo final feliz.

Por si no lo sabéis, en Barcelona existen dos barrios para la comunidad Gay, el archiconocido Gaixample y el Born, que poco a poco va haciéndose un nombre para esta comunidad. Es precisamente en este último barrio donde se ubica Puzzlemanía. Un buen día, un chico entro en la tienda para preguntar si hacíamos masajes. Nos comentó que quería un chico, pensándose que éramos una sauna. Os adelanto que claramente pone Puzzlemanía en la puerta de entrada ¡Imaginaos qué cara se nos quedó!, ¿Qué tipo de puzzle buscaba este chico?

Cada día mucha gente nos demuestra que Puzzlemanía es el paraíso de todo puzzlero. Hay muchas personas que entran a la tienda y se emocionan diciendo esto es una maravilla, un paraíso. -- ¡Yo quiero vivir aquí!—dicen --, este es mi mundo--.
Hace poco entró una pareja asiática a la tienda. Ella daba saltos de alegría, se hacía fotos por todos los lados, ¡Con todos los puzzles!. Incluso posé con ella en una foto, estaba súper emocionada. Al final de la visita se llevaron nada menos que 10 puzzles.

Esta anécdota nos demuestra lo pequeño que es el mundo. Un cliente brasileño entra en la tienda y compra puzzle. Yo tenía un paquete para enviar a Brasil que estaba embalando, y cuando el cliente fue a pagar pudo ver el nombre de la persona a la que iba dirigido. Curiosamente, este señor conocía al destinatario del paquete.

Una pareja me conto que se conocieron y enamoraron gracias a unas piezas de rompecabezas. Estaban en un bar tomando una copa. En una mesa había un puzle dispuesto para que la gente lo montase. Parece ser que los do decidieron colocar piezas de este puzle a la vez, lo que provocó una conversación espontánea y con ello se unieron dos piezas más en el amor.

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Eva Irene B.G / Redacción
Puzzlemanía.net